Vulcanonautas | POY Latam

La boca principal de la erupción en fisura vista desde el camino de Cabeza de Vaca. Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

El Brigada Armando Salazar del GIETMA-UME (Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales de la Unidad Militad de Emergencias) caminando sobre escorias de lavas AA aún a más de 300º C para recoger muestras para el IGME-CSIC (Instituto Geológico y Minero de España perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas). Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

Una casa es destruida a cámara lenta por las coladas tipo AA. Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

Detalle de un río de lavas Pahoehoe, estas lavas son realmente rápidas, pueden alcanzar velocidades de hasta 40 km/h, dependiendo de la pendiente y la viscosidad. Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

Pablo Gonzalez (izq) Vulcanólogo del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Cietíficas) y Carla Valenzuela (dcha) Sismóloga del GFZ (Instituto de Geofísicas de Alemania) toman datos en la playa de Los Guirres, en Tazacorte, sobre el comportamiento de las lavas al contacto con el océano. Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

El Cabo Álvaro Heredia del GIETMA-UME (Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales de la Unidad Militad de Emergencias) en un momento de descanso después de caminar sobre escorias de lavas AA aún a más de 300º C para recoger muestras para el IGME-CSIC (Instituto Geológico y Minero de España perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas). Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

El Brigada Armando Salazar (dcha) y el Cabo Álvaro Heredia del GIETMA-UME (Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales de la Unidad Militad de Emergencias) tomando muestras de lava líquida para el IGME-CSIC (Instituto Geológico y Minero de España perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas). Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

El Brigada Armando Salazar (sosteniendo la cámara térmica), el Cabo Álvaro Heredia del GIETMA-UME (Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales de la Unidad Militad de Emergencias) y José Mediato (izq) del IGME-CESIC Instituto Geológico y Minero de España perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas) tomando muestras de lava líquida. Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

El Brigada Armando Salazar y el Cabo Álvaro Heredia del GIETMA-UME (Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales de la Unidad Militad de Emergencias) caminando sobre escorias de lavas AA aún a más de 300º C para recoger muestras para el IGME-CSIC (Instituto Geológico y Minero de España perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas). Este último evento marca la primera vez que este volcán ha entrado en erupción desde 1971. La isla de La Palma es parte de las Islas Canarias españolas y es una de las zonas más activas volcánicamente en el archipiélago, con una población de alrededor de 85.000 personas. La última erupción fue precedida por varios enjambres sísmicos. Más de 7000 aldeanos fueron evacuados y mas de 1300 hogares destruidos.

Entre el 19 de Septiembre y las Navidades del mismo año, la isla de La Palma, se convirtió en el mayor laboratorio a cielo abierto del mundo con miles de científicos de diferentes disciplinas haciendo experimentos en la que ya se conoce como la Pompeya del siglo XXI. Miembros de la Unidad Militar de Emergencias colaboraron estrechamente con todo aquel que pedía su ayuda, para acercarse a las ardientes fauces del volcán Cumbre Vieja y recoger las más peligrosas muestras para los posteriores experimentos, realizados por centros científicos de España, Alemania, Inglaterra, EEUU, Japón o Chile.

Se derribaron mitos, se descubrieron nuevas evidencias del colapso de flancos de las islas oceánicas y sobre todo se formularon nuevas hipótesis sobre la formación de nuestra casa, la Tierra. Todos estos esfuerzos ayudarán en el futuro a una mejor predicción de los ciclos eruptivos en todo el mundo, así como a afrontar mejor desastres naturales de esta índole.